Comencé a sacar cuerdas, papeles, tijeras, sellos…Me dejé llevar y me presenté al concurso que hacía Mr. Wonderful para ganar una plaza en el primer taller que se hacía en el estudio, en este caso, de scrapbooking.
Imaginaos mi emoción al saber que era una de las ganadoras. En cuanto vi la noticia me puse a ver todas las maneras posibles de hacer Madrid-Barcelona, en un viaje relámpago debido al poco tiempo que tenía, sorteando entre trabajo y estudios. Finalmente fueron seiscientos y pico kilómetros en coche, pero acompañada se hizo más llevadero. Llegábamos a Barcelona el jueves de madrugada.
Pitu y María, dos soletes y amigos, nos acogieron en su casa. Tras unas horas de sueño, una comida riquísima y pelearnos con los semáforos, llegué al Estudio Wonder.
Podéis imaginaros como es, un lugar tranquilo, con mucha luz, inspirador… Muy acorde a su filosofía y a lo requetebonitos que son ellos y sus diseños. Mis ojos no daban abasto a fijarme en todo lo que veía.
Judy, atenta y cariñosa con todos nosotros, nos enseñó un poquito del arte del scrapbooking y a todos nos picó el gusanillo de crear con nuestras manitas pequeños recuerdos fotográficos en forma de papel. Fue un auténtico placer conocerte.
El estudio Wonder y su gente nos trataron como en casa, mimaron cada detalle de nuestra visita. Prepararon una merendola riquísima y preciosa. No sabíamos si ponernos a comer o no parar de hacer fotos a tanta cosa bonita que veíamos.
Angi, quien nos enseñó cada rinconcito de Mr Wonderful y permitió, muy paciente, que nos transformáramos en paparazzi. Tuve la suerte de sentarme al lado de su mami, y compartir nuestras dificultades a la hora de coser el librito; que mujeres más encantadoras.
Todo esto ocurrió el pasado mes de mayo, pero no quería dejar de compartilo porque para mi fue un empujoncito para seguir aun con más ganas en este mundo creativo, coger confianza y tener claro que quería lanzar la idea de tener mi pequeño espacio.
Fue un viaje relámpago que mereció la pena y además, en muy buena compañía. Gracias al Estudio Wonder por darme la oportunidad de compartir aquella tarde, a Judy por enseñarme una nueva vía para crear y a mi gran compañero de viaje .